Este compuesto es menos conocido que otros suplementos que se consumen a diario por deportistas pero aquí vamos a conocerle un poco más.
El ácido linolénico conjugado o CLA como se le conoce popularmente por sus siglas, proviene del ácido linolénico, el cual es un ácido graso poliinsaturado de la serie omega 6. El CLA se produce fundamentalmente en estómagos de los rumiantes como resultado de reacciones de biohidrogenacion. Por lo tanto lo encontraremos principalmente en alimentos de origen animal provenientes de rumiantes y en productos lácteos de los mismos.
Entre las funciones que se le otorgan al CLA están la capacidad que tiene para promover el metabolismo de la insulina y con ello una mejor tolerancia a la glucosa (interesante en pacientes diabéticos), ayuda a construir y reparar el músculo y favorecer la pérdida de grasa, también estudios respaldan que podría favorecer la inmunidad, proteger contra el cáncer y contra enfermedades coronarias.
En cuanto a la suplementación de CLA durante la práctica deportiva estudios indican que mejora la sensibilidad a la insulina en ejercicios de resistencia y una mejor expresión de la proteína GLUT 4 que es una de las puertas de entrada de la glucosa a la célula, todo ello repercute en una mejor tolerancia y utilización de la glucosa por el músculo optimizando el rendimiento deportivo.
La suplementación puede aportar entre 1500 y 4000 mg, tomando de 6 a 7 comprimidos de 600 mg en 2-3 tomas con las comidas.
Por lo tanto debido a que el CLA mejora la sensibilidad a la insulina especialmente en ejercicios de resistencia, los deportes más propicios para su utilización como suplemento son las pruebas deportivas de larga distancia como maratones, trails, ciclismo…